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Whanganui es un río y es una persona

Whanganui es un río y es una persona

Whanganui soy un río y soy una persona

Nueva Zelanda ha otorgado el estatus de persona jurídica al río Whanganui, venerado por los maoríes en la Isla del Norte. El Parlamento ha aprobado una ley que combina los precedentes legales en Occidente con el misticismo maorí. La iniciativa es pionera en el mundo. Los maoríes, los indígenas de Nueva Zelanda, hacía 160 años que pedían el reconocimiento del río como una entidad viva.

El río, el tercero más largo del país, tendrá derechos y deberes jurídicos y podrá ser representado ante un tribunal por un delegado del Estado y otro de la minoría Whanganui iwi (maorí), informó el diario New Zealand Herald.

Sé que la reacción inicial de algunos será [pensar] que es bastante raro dar personalidad legal a un recurso natural, pero no es más raro que una fundación familiar, una compañía u otro tipo de sociedad“, afirmó Chris Finlayson, ministro para la Negociación de Tratados.

No es la primera vez que Nueva Zelanda reconoce estatus de persona jurídica a un recurso natural, ya lo hizo en 2013 con el Parque Natural T’Urewera, en la Isla del Norte. “Este acuerdo reconoce la profunda conexión espiritual entre la minoría Whanganui iwi y el río ancestral“, agregó Finlayson.

Río Whanganui
Río Whanganui

Dicho Maorí: “yo soy el río y el río soy yo”

Un grupo de la minoría maorí presente al Parlamento en Wellington ha celebrado con bailes y cantos tradicionales la aprobación de la ley, un hito histórico en el país. “Yo soy el río y el río soy yo”, reza un dicho maorí. A partir de ahora los derechos del Whanganui podrán ser defendidos en un tribunal como los de cualquier otra institución humana.

El acuerdo al que se llegó sobre el río, que atraviesa parcialmente el parque natural Whanganui, incluye una compensación del Gobierno a la minoría Whanganui iwi de 80 millones de dólares neozelandeses (52 millones de euros), así como 30 millones más (19 millones de euros) para mejorar la salud del río.

Fuente: cat.elpais.com